Era lo más importante

Suavemente, sutilmente, agradablemente llegaron temas para dialogar, ocasiones vividas, ruidos incontrolados….

Todo tenía sentido mientras escuchaba una música placentera. La ocasión no era para menos, estábamos celebrando la fiesta de su sesenta cumpleaños.

No había caido todavía la tarde y ya se notaba el relax de una muy grata comida en familia.

Sí, en familia, como siempre, como toda la vida.

Hermanos, hijos, sobrinos, cuñados…, solamente faltaban lógicamente los padres. Ley de vida, dicen, y no hay más, pero siempre hay menos, y de menos los echaba. Cumplir 60 años no era nada. En su mente estaban presentes cada uno de sus años pasados. No quería olvidar nada. Todo valía para esa vida que le resultaba ahora corta, muy corta. Aún pensando en las personas que faltaban, le parecía corta. Corta porque tenía su alcance todo lo que su memoria le enseñaba, y era mucho y muy cercanos sus recuerdos. Todos se podían palpar, sentir que estaban pasando de nuevo.

No quería poner freno a su afán de revivir el pasado. Un pasado gratificante, agradable. En realidad su vida no había pasado inadvertida. Ni ella tampoco.

Siempre ha estado emplazándose para tomar nuevos caminos y hacerlos llegar a su terreno, donde ha podido recrearse con la novedad encontrada.

Ahora tocaba hacer cuentas. Cuentas sobre sus experiencias, repasar un poco el tiempo transcurrido. 60 años han debido dar para mucho, y pensaba que era el momento de tomar decisiones y de pensar en el futuro. Se consideraba apta para seguir cabalgando hacia él. Máxime cuando ella pensaba que el presente no existe.

Un futuro que realizamos cada día, cada momento de vida. Es fácil pronosticar el futuro. Va con nosotros en cada movimiento y en cada respiración.

Y todo esto sucedía durante el 2007. Para ella con un significado especial. Por primera vez en su vida se había parado a pensar en todo lo que le había ocurrido durante ese año…. Y lo más importante es que había logrado cumplir los 60. Quedaban muy pocos días para que se cumplieran los 365 días establecidos para la conclusión del año, y solo le parecía importante haber llegado a los 60.